


Ha logrado hacer la diferencia frente a aquellos que piensan que una estrella de la música debe estar alejada del trajinar partidista.
Dialogar con “El Negrito de Villa” es darse cuenta de que (nació para ser artista y para político) cada área parece ocupar la mitad de él.
“Cuando voy a cantar, Sergio el diputado no sube a la tarima”, afirma.Así es. Ayer echó a un lado su figura como legislador y subió a la tarima para presentar su nueva producción discográfica Amores viejos, nuevos y de medio uso, tras un silencio musical de cinco años.
Vargas cree que ha logrado “una gran oferta hecha con mucho respeto y cariño para unos seguidores que por 25 años han confiado discográficamente en mí”. Pero además, la concibe como un “atrevimiento”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario